En el Día del Amor nada mejor que hacer regalos con mucho mimo.
Y después de tomarnos una buena botellita de vino,
la creatividad se dispara,
sobre todo si tenemos un montón de corchos
y unas manitas hábiles para hacer cosas tan chulas
como unos sellos o un corazón hecho con corchos de vino.
¿Nos ponemos «corchos» a la obra? ;)