Mezclar la danza y el vino, fusionar diferentes ramas del arte y realizar una creación única. La rama de vinos tranquilos de bodegas Vallformosa, Domenéch.Vidal, el estudio de diseño Ladyssenyadora (de quienes ya hemos hablado en nuestro blog por las etiquetas de Tinta de Vi) y la productora Centset (trabajo por el cual han ganado el premio al Mejor Trabajo Promocional en la sección de Collita del MOST, Festival Internacional de Cine del Vino y el Cava) han sabido plasmar con suma delicadeza y belleza en las etiquetas de Cultivare la pasión por su labor y la dedicación en cuerpo y alma al cultivo de la tierra, origen de sus vinos.
Todo el proceso creativo es digno de admirar y conforma un proyecto multidisciplinar. Los bailarines Olga Álvarez y Joan Palau recrearon una coreografía inspirada en el ciclo de la vid al ritmo de la música de Miguel Marín.
Sobre un escenario compuesto por 5.000 etiquetas de vino y contando con la bodega como teatro, danzaron bajo una lluvia de pintura (amarilla para el vino blanco y roja para el tinto) que iba tiñendo sus cuerpos. Y con sus movimientos hacían que cada etiqueta fuera única y diferente, convirtiéndolas en auténticas obra de arte.
Cultivare es la marca de los vinos tranquilos de Domenéch.Vidal, del grupo Vallformosa, conocido por sus cavas D.O. Penedés.
“Un vino que nace del arte de nuestra tierra. Del maridaje entre nuestros mejores frutos y lo mejor de nuestro patrimonio cultural. Una forma de expresión artística, particular y única en el mundo.”
El vino blanco es un monovarietal Xarel.lo procedente de viñedos de más de medio siglo ubicados en Vilafranca de Penedès. Vinificado en tres partidas diferentes: una en madera, otra en acero inoxidable, y la última en crianza en huevos de cemento.
El vino tinto es un coupage de Sumoll y Samsó, de viñedos de más de 60 años de tierras del Masís del Garraf. Envejecido durante un año en roble francés.
Os dejamos aquí también el Making Of completo. Imperdible:
